Robata, Sushi creativo

Al entrar por la puerta te sientes como si ya no anduvieras por la ciudad condal, sino en un local oscuro de una callejuela nipona. Cuando se acostumbran los ojos al cambio empiezas a ver los detalles cuidados en cada rinconcito, los claro oscuros, las fotografías, la vajilla, las plantas y las mesas iluminadas en su justa medida para que veas tus platos, y lo demás conserve un poco de misterio.

En Robata probarás un sushi diferente, creativo y artístico alejado del sushi al que estamos acostumbrados, aunque conservando las clásicas técnicas niponas. Pero no sirven solo sushi, el tataki está de muerte y las gyozas son brutales sin olvidar el yakisoba o las tartas para acabar la comida redondo.

Nosotros estuvimos en nuestra cena de navidad y pudimos probar su menú para eventos con una selección de 14 platos de la carta mas postres y bebidas, y fue muy chulo poder probar tantos platos de una sentada. Nuestros imprescindibles son el anticuchero y el tataki de atún. La carta es extensa, y hay para todos los gustos, sabores más latinos o más orientales, así que es un buen lugar para reunirse en grupo.

¡Sobre todo, no salgáis por la puerta sin tomar postre! Aunque quizás resulte inesperado comerte un trozo de tarta americana tras tu super sofisticado sushi… funciona. Es un soplo de aire fresco y saldrás con una sonrisa de oreja a oreja, ¡la lemon pie es impresionante!

 

ROBATA

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