Las manzanas son crujientes, jugosas. Huelen a campo… una pena desechar cualquier producto, pero más pena me daba deshacerme de aquéllos 3 hermosos ejemplares que estaban ya medio mustios en el frutero. Así que opté por algo más resultón que una simple compota, como una compota exprés con ingredientes que siempre tengo en casa y que se convierte en un postre delicioso para comer templado o frío en un día de picnic.
[one_third]Ingredientes
1 kg de manzanas
130 g de azúcar
Canela en polvo
100 g de harina
100 g harina de almendra o nueces
80 g de mantequilla
jengibre molido[/one_third][two_third_last]Elaboración
Pelamos, descorazonamos y cortamos a dados las manzanas. Llenamos con ellas un molde para tartas o varios individuales.
Sazonamos con 30 g de azúcar y una pizca de canela y jengibre molidos.
En un recipiente, mezclamos la mantequilla fría con la harina y el resto del azúcar hasta formar una masa arenosa.
Cubrimos el molde con esta mezcla, sin presionar.
Cocinamos en el horno a 170º C durante 45 minutos o hasta que esté dorado.
Podemos acompañarlo con yogur griego denso o con helado.[/two_third_last]
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